El lunes nos despertamos sin prisas y disfrutamos de un desayuno relajado en el hostal de Puerto Natales, siendo los últimos en dejar el comedor.
Preparamos unos sándwiches con pan del desayuno, una estrategia para ahorrar tiempo y dirigirnos directamente al Parque Nacional Torres del Paine.
En el centro de información turística junto al famoso muelle de Puerto Natales, nos enteramos de que las entradas al parque solo se podían adquirir online y optamos por comprar la entrada de tres días. El día estaba lluvioso, pero aun así decidimos ir hasta el parque en un viaje que nos pareció extremadamente largo desde la ciudad, y donde nos empezamos a plantear si habría sido mejor explorar más el lado de Argentina, con rutas en El Chaltén, que haber pasado a Chile, ya que los precios son mucho más altos en Torres del Paine, el tiempo peor, y las distancias... gigantes.
Dentro del parque, lo primero es hacer check-in con nuestros códigos QR de la entrada, para ya luego recorrer el camino de sur a norte haciendo pequeñas paradas bajo la llovizna.
La primera parada fue una pequeña cascada bajo la lluvia, la cascada chica, rodeada de todo un complejo hotelero que parece impresionante... sobre todo en precio.
La siguiente parada fue la cascada grande, donde hay un pequeño camino de media hora que nos llevó hasta el mirador de los Cuernos del Paine, donde el tiempo mejoró, regalándonos vistas impresionantes y quitando nuestra idea de la cabeza de que habría sido mejor quedarnos en Argentina.
El viaje se tornó aún más emocionante cuando, tras un encuentro casual en un mirador, un viajero compartió con nosotros un vídeo de un puma que había cruzado nuestro camino sin que nos diéramos cuenta. Aunque intentamos encontrarlo sin éxito, la suerte nos sonrió más adelante, permitiéndonos observar otro puma descansando tranquilamente.
Nuestra jornada concluyó con un frenético regreso a Puerto Natales para abastecernos de provisiones antes de que cerrasen los supermercados, ya que viendo las previsiones del tiempo, habíamos decidido que la ruta al mirador base torres fuese al siguiente día.
Esta noche, tras 2 horas desde la salida norte del parque, llegamos in-extremis al supermercado en Puerto Natales y tras ello cenamos en lo único abierto y cercano al hostel, un restaurante chino.
Torres del Paineparque nacionalCuernos del PainecascadaspumasPatagoniaPuerto Natales