Preparativos

Adivinando el futuro, los preparativos del viaje a ChileEmpieza a ser habitual en nuestros viajes, sustituir "Estamos pensando en ir a..." por "unos amigos nos llaman comentando que se van a...."

Y sí, este viaje es una de esas ocasiones en que, en este caso Ismael y Macarena, nos comentan que por motivos de trabajo van a Chile y aprovecharán la estancia para ir unos días al desierto de Atacama y la isla de Pascua en las vacaciones de semana santa.

Inmediatamente, nos ponemos a cuadrar fechas para conseguir, en dos semanas, visitar los 3 puntos más destacados del país desde nuestro punto de vista: Isla de Pascua, Atacama y Torres del Paine.

Hacemos cálculos y vemos que es posible hacerlo ajustando los vuelos internos con base en Santiago. Así que dicho y hecho, nos ponemos manos a la obra. 

En primer lugar, reservamos los vuelos de Pascua, que son los más exclusivos y donde antes se acaban las plazas, ya que solo hay un vuelo diario desde Santiago.

Una vez tenemos los billetes de Pascua sacamos el vuelo internacional con el viaje de vuelta casi enlazado con nuestra vuelta de la isla.

A continuación miramos el calendario, vemos videos y decidimos (4 meses antes del viaje):

• Llegamos a Santiago un domingo a las 8 de la mañana
• Ese mismo día a las 12.30 hay un vuelo a Punta Arenas, aeropuerto más cercano a Torres del Paine.
• Desde allí alquilaremos un coche para estar en Puerto Natales, punto de entrada a la zona, a unas 3 horas en coche del aeropuerto. Con la intención de dormir allí la primera noche y pasar 3 días completos en el parque.
• El cuarto día tenemos un vuelo a las 11 de la mañana hacia Santiago para, pocas horas después, volar hacia el desierto.
• Llegaremos por la noche a San Pedro de Atacama y pasaremos 3 días completos allí, para al cuarto coger el avión hacia Santiago, donde permanecemos un día antes de volar a la Isla de Pascua.

Ufff, la cosa está bastante apretada, pero nos parece aceptable, así que compramos el resto de vuelos.

Empezamos con el vuelo del Desierto de Atacama, entramos en Rumbo y ponemos como aeropueto de origen Santigo y en el destino escribimos "Atacama" y nos sale "desierto de atacama", así que vamos pasando, siguiente, siguiente, siguiente..... hasta finalizar la compra.

Contentos de haber conseguido un buen precio, ponemos un vídeo de "Alan x el mundo" visitando Atacama, uno de nuestros Youtubers favoritos  (si no lo conocéis, echadle un vistazo a su canal de viajes porque merece muchísimo la pena), y lo primero que dice es:

• "Aterrizamos en el aeropuerto de Calama, el más cercano a San Pedro de Atacama".
• ¿¿Qué??, ¿¿cómo ha dicho que se llama el aeropuerto??

Primer ataque de pánico al darnos cuenta que hemos comprado billetes para el aeropuerto equivocado, que también nos llevaba al desierto de Atacama, pero a unos 1000km de San Pedro.

Tras la metedura de pata, la correspondiente solicitud de anulación del billete y el mal sabor de boca que no dejó recuperar solo 20 eur de cada billete, nos decidimos a comprar los billetes correctos hacia Calama.

Todavía con el bajón sacamos también el billete a Punta Arenas para ir a Torres del Paine.

Así, todo parecía estar cerrado y resuelto para el viaje con 4 meses de antelación. Cuál sería nuestra sorpresa cuando:

• Pasada una semana nos mandan una modificación del vuelo Valencia-Madrid-Santiago, indicando que volvemos 1 hora antes el día de la vuelta. Primer susto sin consecuencias, todo sigue cuadrando perfectamente.
• Pasado un mes nos mandan otra modificación, en este caso el vuelo a Torres del Paine pasa de salir a las 12.30 a salir a las 6.05 de la mañana. HORROR, el cambio hace que el vuelo salga ANTES de que nosotros lleguemos a Santiago a las 8.45!!! Investigando otras opciones, vemos que no hay más vuelos ese día, por lo que tendriamos que volar al día siguiente, reduciendo un día completo nuestra estancia en Torres del Paine que ya nos parecía muy ajustada. Así que con mucha pena, decidimos cancelar la visita a esa zona del país. En esta caso nos devuelven el dinero al ser una decisión de la compañia.
• De repente, nos encontramos con un montón de días, anteriores a nuestra estancia en Atacama, donde no sabemos qué hacer.
• Decidimos contactar con Jetsmart, la compañía con la que vamos al desierto a ver si nos puede cambiar el vuelo y adelantarlo un par de días.... y sorpresa, rápidos y super-agradables nos cambian el vuelo dos días antes a las 16.10 y gratis!!!
• De nuevo lo tenemos todo ajustado, llegamos un domingo a las 8.45 a Santiago, donde nos quedamos dos días enteros, para el martes volar hacia Calama a las 16.10.
• De modo que decidimos reservar un hotel con desayuno cerca del aeropuerto para dormir el lunes.
• Al poco tiempo recibimos otro mail, adelantando a las 11.30 el vuelo hacia Atacama, ese cambio de horario nos mejora el plan.
• Pasado otro mes, recibimos otro ajuste en el horario del vuelo hacia Atacama. La salida pasa a las 6.47 y la vuelta a las 21.30 de la noche. Joooo, perdemos la opción de desayunar en el hotel, como habíamos planteado, pero nos da la opción de aprovechar todavía más la estancia en el desierto que promete mucho.

Así va pasando el tiempo, recibiendo de vez en cuanto nuevos e-mail de ajustes horario en los vuelos, que siempre nos ponen la piel de gallina, pero que ya no alteran significativamente nuestros planes.

La fecha del viaje se acerca, así que cruzamos los dedos y hacemos las últimas reservas de alojamientos.

Curiosamente, el vuelo transoceánico NO incluye equipaje facturado, pero como últimamente solemos viajar solo con equipaje de mano, no nos importa demasiado, así que preparamos nuestras mochilas y salimos hacia el aeropuerto.

Una cosa que se nos ocurrió a posteriori, viendo la cantidad de ajustes en  los vuelos, es que si en vez de anular inmediatamente el vuelo que compramos por error, hubiesemos dejado pasar un tiempo, lo más probable es que con tantos cambios nos habrían devuelto el dinero. En fin...  imposible controlarlo todo. Comienza el viaje!