Para finalizar nuestro viaje regresamos a Las Vegas, punto de vuelta para España.
De camino recorremos parte de la ruta 66, que tiene más de mítico y de nombre que de interés real, no deja de ser una carretera que pasa por diferentes pueblos con aspecto de abandono total, tal vez hacerla en moto tenga una cierta gracia, pero en general no va más allá.
Ya en Las Vegas hacemos los recorridos típicos por la famosa calle de los casinos, con reproducciones a tamaño real de muchas zonas europeas famosas, desde la Fontana de Trevi hasta la torre Eiffel pasando por los canales de Venecia, entre otras cosas...
Es todo un super-festival de luces y derroche por todos lados, los casinos son gigantescos, dentro hay miles de máquinas y mesas con gente jugando, como en las películas.
Por lo demás, estamos muy apenados por terminar el viaje, nos ha E-N-C-A-N-T-A-D-O, los parques nacionales del OESTE de USA son impresionantes, gigantescos, muy bien cuidados, limpios, y todos ellos dignos de ver.
Volveremos!