Pasamos el día en la Alpujarra disfrutando con calma de tres de sus pueblos, apenas separados por 2 kilómetros uno de otro.
Relativamente lejos de Granada está la Alpujarra, allá donde se quedó Boabdil con su pueblo tras dejar la ciudad a los reyes católicos.
El recorrido consiste en bordear Sierra Nevada, ya que todos los pueblos de la Alpujarra se encuentran en la cara opuesta de la sierra a la ciudad de Granada.
Dado que solamente ibamos a pasar un día allí, entre la hora y media que hay desde la ciudad y el no querer correr viendo las cosas, nos habían recomendado centrarnos en visitar solamente 3 pueblos: Pampaneira, Bubión y Capileira.
De modo que hicimos caso a las recomendaciones y no paramos en el famoso Lanjarón, de paso hacia los indicados.
Los tres pueblos se encuentran seguidos hacia arriba, primero visitamos Pampaneira, el más pequeño de todos y
Curiosamente y para nuestra sorpresa no había excesivo turismo incluso siendo sábado, con lo que pudimos recorrer las calles gran calma.
En los mismos pueblos además pudimos seguir disfrutando de las famosas tapas a gran precio granadinas, ya que a pesar de ser lugares turísticos, se encontraban a precios razonables.
Los pueblos son muy bonitos de visitar y pasear con calma, recorriendo las mil calles y rinconcitos diferentes, sin prisa, observando y disfrutando cada detalle.
Poco a poco se nos pasó el día completo y dado que al día siguiente era la gran ruta cicloturista decidimos volvernos al hotel y dejar la alpujarra justo antes de la puesta de sol no sin antes hablar con gente de allí de la posibilidad que había de seguir por carretera hasta un punto desde donde había una ruta asequible para subir el Mulhacén, fuese en caminando o en bicicleta, algo que nos quedó pendiente para una futura visita.
Además de los 3 pueblos nos recomendaron la visita a la "Fuente Agria", fuente que no nos dió tiempo a ir y que al volver al hotel observamos que deberiamos haber ido justo antes de tomar el desvío para estos tres pueblos, un desvío no muy lejano que desde luego habría merecido la pena.